“La última frontera de los viajeros’ (Lonely Planet)
Área: 462,840 Km2
División política: 20 provincias
Capital: Port Moresby
Moneda: Kina
Idiomas: Oficial: Inglés; nacionales: Inglés, tok pisin (criollo del inglés) y motu; no oficiales: más de 800
Fiesta Nacional: 16 de setiembre, independencia
Población (2003): 5, 295,816 habitantes
Etnias (1983): melanesios, papúes, micronesios, polinesios
Alfabetización (2000): 64.5%
Religión (1990): protestantes 39%, católicos 22%, anglicanos 5%, creencias tradicionales 34%
Recursos naturales: oro, cobre, plata, gas natural, madera, aceite, pescado.
Peligros naturales: volcanes, terremotos, tsunamis
Agricultura: Café, cacao, cocos, almendras de palma, té, caucho, camote, frutas, verduras, avicultura, carne de cerdo.
Consiste en más de 600 islas ubicadas a 160 Km. al norte de Australia. El país comprende la mitad oriental de la isla de Nueva Guinea, la cual comparte con una provincia de Indonesia. El suelo es casi totalmente de origen volcánico y muy montañoso. Posee un clima tropical, generalmente caliente, pero hay algunas excepciones, con dos marcadas estaciones, la seca y la lluviosa lo que significa que la época lluviosa es muy lluviosa y la seca es poco lluviosa.
Alberga alrededor de 9000 especies diferentes de plantas, 180 especies de mamíferos, más de 60 marsupiales, 700 especies de pájaros, entre los cuales figuran 38 de las 43 más espectaculares aves de paraíso del mundo.
Tan solo en Papua Nueva Guinea hay 300 idiomas diferentes que no tienen una sola porción de las escrituras en el lenguaje de su corazón, eso representa más de un 10% del los idiomas carentes de Biblia a nivel mundial.
Estos pueblos eran guerreros y caníbales hasta que llegó el evangelio a sus culturas. Ellos poseen más de 800 idiomas diferentes, eso se representaría como si en nuestros cantones o distritos se hablaran idiomas diferentes, no dialectos, si no idiomas totalmente diferentes uno del otro.
Papua ha sido evangelizado pero en idiomas masivos, no en los de cada pueblo. La Biblia se ha ido traduciendo a varios idiomas, pero aun hay mucho trabajo por hacer, todavía hay pueblos que no comprenden claramente la palabra de Dios ya que se les predica en un idioma ‘comercial’ que ellos no entienden claramente.
Esto ha causado que mezclen el mensaje del evangelio con tradiciones de sus antepasados, o que no tengan un claro panorama de Jesús, a veces preguntándoles a los misioneros si Jesús era familiar de alguno de ellos.